Comenzamos
con un nuevo bloque de contenidos: “familia y escuela” y con ello una nueva actividad en la que
pretendo analizar las dimensiones socio-familiares que influyen en el
rendimiento escolar del alumno. Para realizarla me he basado principalmente en
tres artículos que os explicaré a continuación pero antes de nada quiero
justificar de forma breve los motivos que me han llevado a elegirlos:
Para
empezar quería utilizar como fuente de información la revista digital y más en
concreto la revista científica. Como ya dije en la actividad 2 de este blog, me
gusta escoger las revistas digitales para este tipo de trabajos principalmente
por la permanente actualización que tienen. Esta vez creo que he podido hacer una búsqueda un poco
más profundizada y tras consultar diferentes bases de datos he elegido “la
Revista de Educación”.
Consultando
la página del Ministerio de Educación: http://www.mecd.gob.es/revista-de-educacion me aseguré de que la revista contaba con
varios indicadores directos de calidad: revista
indexada en Journal Citation Reports, en Social Sciences Citation Index, en los listados ERIH 2011 de la European
Science Foundation: categoría INT2. Revista presente en SciMago Journal Rank
2012 (SCOPUS) y en DICE. Revista indexada en RESH, Categoría CIRC: A1,
categoría CARHUS: A y categoría ANEP-FECYT: A+. Presente en: IRESIE,
PIO, SA, SCUPUS, SSCI, ISOC…, además cuenta con evaluadores externos para la revisión de los trabajos remitidos
al editor, apertura exterior de los autores, cuenta con una valoración
de difusión internacional muy alta (21) y por estos motivos entre otros muchos
la fuente bajo mi criterio es fiable y válida para buscar en ella los artículos
referentes al tema.
En
el último momento también encontré un artículo que me vino muy bien para hacer
el cuadro final de las dimensiones, sacado de “Teoría de la Educación”, una revista científica reconocida que
publica trabajos originales de investigación sobre los aspectos teóricos y
prácticos de la educación.
Llegados
a este punto paso a explicar la elección de los artículos:
- “ Medición del nivel
socioeconómico familiar en el alumnado de Educación primaria” de Javier Gil
Flores, reconocido catedrático de universidad. El
artículo me parece apto para la actividad ya que hace especial hincapié en la
relación del contexto familiar del alumno con la escuela. A grandes rasgos el
autor pone de manifiesto que los alumnos procedentes de familias con un nivel
socioeconómico alto suelen obtener mejores resultados que los alumnos
procedentes de familias con un nivel socioeconómico más bajo.
Si
analizamos los factores que influyen en el rendimiento del alumnado encontramos
principalmente el estatus socioeconómico
del que podemos obtener tres
aspectos básicos:
-ingresos económicos
- nivel educativo
- ocupación de los padres
A
los que podemos y debemos añadir otros como por ejemplo:
-
Características de la vivienda
-
Disponibilidad de libros en el hogar
-
Disfrute de becas o ayudas
-
Frecuencia en la realización de viajes
-
Disponibilidad de servicio doméstico
Siguiendo
a (Gil, 2011) “Asociados al nivel socioeconómico encontramos los estilos de vida, y más en concreto los aspectos funcionales de familia, abarcando
las relaciones entre sus miembros, las actividades realizadas o las actitudes.
Todo ello configura lo que se ha denominado “capital social” que facilita la adquisición en la familia de
valores y normas necesarios para el
éxito en la escuela.
Dentro
de este capital social, podríamos incluir variables como:
-
Actitudes que muestran los padres
hacia la educación
-
Motivación que les dan a sus hijos
-
Ayuda en las tareas académicas
-
Aspiraciones educativas para los hijos
-
Hábitos de trabajo
-
Funcionamiento democrático en la toma
de decisiones
-
Estabilidad familiar
-
Calidad del lenguaje utilizado
-
Nivel de comunicación dentro d la
familia
-
Posesión de casa propia, coche,
ordenador…
-
Lugar de trabajo y lugar de residencia
El
segundo artículo denominado “ El fracaso
escolar en España” pertenece a Marchesi, catedrático de psicología
evolutiva y de educación en la
Universidad Complutense de Madrid; director general y secretario de Estado de
Educación de 1986 a 1996 y destacado por importantes publicaciones como:
“Controversias en la Educación española” o “La evaluación de la educación
secundaria. Fotografía de una etapa polémica”. Marchesi en este artículo trata
el fracaso escolar desde una perspectiva multidimensional y señala un conjunto
de propuestas para poder reducir el fracaso escolar en España.
A la hora de interpretar el fracaso escolar, pone
de manifiesto la influencia del contexto
sociocultural y del contexto familiar y establece tres indicadores clave relacionados
con la familia (nos centramos sólo en
este ámbito que es el que pide la actividad, dejando a un lado de momento el
centro docente, el aula etc.) que influyen en el fracaso escolar y por tanto en
el rendimiento del alumno
:
-
Nivel sociocultural
-
Dedicación
-
Expectativas
Tras
numerosos estudios llega a la conclusión de que el contexto sociocultural influye de manera muy importante en la
educación obligatoria sobre todo en alumnos que si sitúan en un contexto bajo. Además,
“el contexto sociocultural no solo influye en los resultados de los alumnos
sino también en la cultura de la escuela, en las relaciones de los profesores
con las familias y los alumnos, en la organización y en el funcionamiento de la
escuela (Marchesi, 2003).
Al
hablarnos de la influencia del contexto familiar señala que el nivel de
estudios de los padres no abarca toda la influencia familiar, pero sí tiene un
gran peso y propone una serie de variables que
hay que tener en cuenta, muy parecidas al primer artículo:
- lenguaje y
comunicación entre los miembros familiares
- expectativas de los
padres sobre el futuro académico de sus hijos
- apoyo a sus estudios
- hábitos lectores
- actividades culturales
Nos
habla también del capital cultural, argumentando que un capital cultural
enriquecido puede tener poca incidencia en la educación de los niños y sin
embargo padres con escaso capital escolar pueden tener mayor influencia en la
educación de sus hijos por las relaciones que mantienen con ellos.
Para
justificar de nuevo la influencia del nivel
de estudios de los padres en la educación recurre a tres datos:
-
Las
comparaciones realizadas en España sobre el nivel de estudios de la población y
tasa de finalización de estudios en las distintas Comunidades Autónomas.
-
Las
conclusiones del estudio PISA: afirman entre otras cosas que los estudiantes
cuyas madres no han terminado la ESO tienen puntuaciones en habilidad lectora
más bajas que los alumnos cuyas madres si han acabado la enseñanza secundaria.
-
Los
indicadores de la OCDE: comparan el porcentaje de población entre 25 y 64 años
que ha alcanzado al menos educación secundaria superior en los diferentes países.
Los resultados ponen de manifiesto las enormes diferencias entre la población
española que alcanza este tipo de estudios y la población que lo alcanza en el
resto de países de la OCDE: el 35% de los ciudadanos españoles frente al 62% de
la media de la OCDE.
El tercer artículo: “Familia y escuela: dos mundos llamados a
trabajar en común” perteneciente a Antonio Bolívar, trata de las problemáticas de la
familia en relación con la educación. Manifiesta ideas muy relevantes para el tema que nos ataña
como por ejemplo:
“La
familia desempeña un papel crítico en los niveles de consecución de los alumnos, los esfuerzos por mejorar los resultados de
los alumnos son mucho más efectivos si se ven acompañados y apoyados por las
respectivas familias. Si es muy importante el apoyo en casa, éste se ve
reforzado cuando hay una implicación en las tareas educativas desarrolladas por
la escuela.” (Bolívar, 2006).
Coleman
demostró, en el caso americano, cómo el alumnado de las escuelas privadas tenía
niveles de logro notablemente más altos, en la mayoría de las materias, que el
alumnado de las escuelas estatales. Llegó a la conclusión de que esta
diferencia en las escuelas religiosas no era resultado de unas mayores demandas
curriculares o de cualquier otro aspecto perteneciente al interior de la
escuela, sino a la diferente relación que se establecía entre la escuela y las
familias. (Bolívar, 2006).
El
hecho de que la escuela y las familias
trabajen de modo conjunto facilita en gran medida que se pueda mejorar la
educación proporcionada a los alumnos. Como afirman los teóricos del capital
social, si no hay redes de participación en la escuela, las posibilidades de
crear una acción colectiva de provecho son nulas.
Finalmente,
el último artículo: “Estilos educativos
parentales. Revisión bibliográfica y reformulación teórica.”, ha sido
fundamental para diferenciar claramente otra dimensión, el estilo educativo, que según el texto se puede clasificar en:
Tras
analizar toda la información, éste sería el esquema de las dimensiones
socio-familiares que afectan al rendimiento escolar:
1)NIVEL SOCIOECONÓMICO:
·
Ingresos :
o Características de la vivienda
o Disposición de libros
o Becas
o Frecuencia de viajes
o Servicio doméstico
o Posesiones
·
Nivel educativo
·
Ocupación
2)ESTILO DE VIDA:
- Nivel de comunicación /calidad del lenguaje
- Estabilidad familiar
- Hábitos lectores
- Actividades culturales
3)ESTILO EDUCATIVO:
- Actitud de los padres referente a los estudios de sus hijos
- Aspiraciones educativas
- Nivel de independencia
- Funcionamiento democrático en la toma de decisiones
Democrático –Autoritario – Negligente- Indulgente
Bibliografía:
-
Bolívar, A. (2006). Familia y escuela: dos mundos llamados a trabajar en
común. Revista de Educación, 339,
119-146.
-
Gil Flores, J. (2013). Medición del nivel socioeconómico familiar en el
alumnado
de Educación Primaria. Revista de Educación, 362, 298-322.
-
Marchesi Ullastres, A. (2003). El
fracaso escolar en España. Madrid: Fundación Alternativas.
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